Mientras los querían fuera de Atleti, Simeone los mantuvo y ahora son las figuras

Atlético de Madrid no consiguió hacer un gran mercado de fichajes en el pasado verano, consiguiendo firmar a tan solo cinco jugadores, de los cuales son: cuatro defensas y un delantero. Caglar Soyuncu, César Azpilicueta, Javi Galán, Santiago Mouriño y Samu Omorodion fueron los jugadores que recalaron en la institución madrileña en la pretemporada.

Santiago Mouriño y Samu Omorodion fueron cedidos a Real Zaragoza y Deportivo Alavés, respectivamente. Adicionalmente, Samuel Lino y Rodrigo Riquelme regresaron de sus préstamos en Valencia y Girona, respectivamente, donde fueron grandes figuras y destacaron enormemente y hasta fueron tentados para marcharse de la institución, pero Simeone los blindó.

Sin embargo, venían grandes novelas, como la salida de Joao Félix, que fue un préstamo a Barcelona, y luego, Al-Shabab compraba a Yannick Carrasco, dejando un gran espacio en la institución. Javi Galán llegó justo para reemplazar al belga, y además, estaba Samuel Lino, pero también se está esperando a Reinildo Mandava, que está en su última fase de recuperación y pronto volverá.

La otra novela del equipo era la de Álvaro Morata, ya que no sabía si quedarse o irse. Desde Arabia lo solicitaban, pero en Italia lo quería volver a comprar: Juventus, A.C. Milán, Inter de Milán y Roma fueron los que lo querían, pero el jugador terminó por quedarse por pedido del Cholo Simeone, lo que terminó por ser un acierto total, junto con la permanencia de Samuel Lino, que estuvo cerca de irse a RB Leipzig.

Los decisivos del Cholo Simeone

Álvaro Morata estuvo a punto de irse, al igual que Samuel Lino, pero Diego Simeone resistió y se quedó con ellos. Ahora, el ariete ha conseguido anotar siete goles entre La Liga y Champions League. Por su parte, el brasilero ha sido decisivo por la banda izquierda, siendo el mejor jugador del plantel en el mes de septiembre, repartiendo dos asistencias y ya se estrenó como goleador contra Real Sociedad. Ahora, los dos son titulares indiscutidos del entrenador.