Nos siguen quitando, la reacción del Metropolitano tras la jugada sobre Giuliano Simeone

A los pocos minutos de la polémica expulsión de Pablo Barrios, el estadio Metropolitano estalló en reclamos tras una jugada en la que Giuliano Simeone cayó dentro del área. El árbitro Martínez Munuera había señalado un balón atrás para que el arquero Guaita despejara, pero Giuliano, muy atento, presionó al portero y estuvo a punto de robarle el balón. En la acción, el delantero argentino terminó en el suelo, lo que llevó a todo el Metropolitano a reclamar un penalti.

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Sin embargo, tras revisar la repetición de la jugada, se pudo observar que Guaita primero tocó el balón y luego impactó en el pie de Giuliano. A pesar de los reclamos del jugador y la afición, el árbitro no consideró que la acción fuera merecedora de un penalti. Tanto Giuliano como Guaita terminaron en el suelo, lo que obligó a Martínez Munuera a detener el partido, especialmente por la situación del arquero celeste.

La amarilla a Domínguez y el cambio estratégico

Giuliano Simeone volvió a ser protagonista minutos después, cuando recibió un codazo de Domínguez en el rostro durante un salto. El árbitro no dudó en mostrar la tarjeta amarilla al defensor del Celta, aunque desde el Atlético de Madrid se pedía algo más que una amonestación, considerando la fuerza del golpe.

A pesar de la crudeza del impacto, el colegiado y el VAR no consideraron que la acción ameritara una sanción mayor. Sin embargo, el técnico del Celta, Claudio Giráldez, no quiso arriesgarse a una posible segunda amarilla para Domínguez y decidió sustituirlo por Mingueza.

Estas dos jugadas polémicas marcaron el desarrollo del partido y generaron diversas reacciones entre los aficionados y los analistas deportivos. La actuación del árbitro Martínez Munuera fue objeto de debate, y las decisiones tomadas en ambas acciones influyeron en el resultado final del encuentro.

El partido entre Atlético de Madrid y Celta de Vigo dejó en claro que el fútbol es un deporte lleno de emociones y controversias, donde las decisiones arbitrales pueden tener un impacto significativo en el desarrollo y el resultado de los partidos.