Atlético terminó enfadado por el polémico arbitraje de Jorge Figueroa Vázquez

La primera acción polémica del triunfo 1-0 ante Athletic Club Bilbao fue el gol anulado a Álvaro Morata en el primer tiempo. El delantero disputó un balón con el defensor Yeray, quien cayó al suelo, y con una definición fantástica puso en ventaja al Colchonero. El árbitro Figueroa Vázquez cobró el gol, pero luego fue avisado por el VAR, que revise la jugada.

Aparentemente un roce de la pierna derecha, sin intención, toco el talón de Yeray y eso fue lo que hizo que el gol fuera anulado. La duda es si realmente eso hizo que el defensor se cayera o si fue simplemente un tropezón por parte del futbolista de Athletic. En total, fueron cinco las faltas en contra, que pitó el madrileño en la Catedral.

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Por otra parte, el conjunto rojiblanco recibió un exceso de tarjetas amarillas en 17 faltas realizadas. Fueron siete, seis jugadores y la del entrenador argentino Diego Cholo Simeone. Mientras que Athletic realizó 14 fouls y no recibió ninguna tarjeta en su contra. Algo que sorprende porque el pisotón de Villalibre a Witsel podría haber sido roja.

Otra tarjeta, que generó indignación y preocupación en Atlético de Madrid fue la que recibió el portero Oblak tras un golpe, que lo sacó del campo de juego. El arquero esloveno quedó conmocionado y el colegiado decidió amonestarlo por salir del campo por el lateral y no por el fondo como pretendía él que sucediera.

Enrique Cerezo también hizo su descargo ante Figueroa Vázquez

El presidente del Colchonero, señaló: “Esto ya ha sido el colmo. El VAR llegó para corregir errores, no los aciertos. El gol de Morata era completamente legal. No sé dónde han visto falta para llamar al colegiado que había concedido el gol. Se supone que el VAR interviene para corregir errores manifiestos y graves”.