Kieran Trippier, el descartado por el Atlético de Madrid que la rompe en Newcastle

Al Atlético de Madrid no le alcanza con los disgustos que tiene dentro de sí que también debe sufrir por situaciones del exterior. En este caso se trata de Kieran Trippier. El lateral llegó en 2019 al club a cambio de 13 millones de euros al Tottenham, y en enero de este año se marchó por 15 al Newcastle. Es cierto que dejó algo de ganancia, pero lo que ocurrió desde este arranque de temporada hace que la dirigencia se arrepienta de no haberle sacado más rédito.

En inglés de 32 años llegó a las Urracas poco después de que el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita comprara el club. El segundo semestre del curso 2021-22 consistió en salvarse del descenso, pero en el 2022-23 el equipo mostró otras ambiciones. Los dirigidos por Eddie Howe marchan cuartos en la presente edición de Premier League, a siete del puntero Manchester City.

Más noticias de Atlético de Madrid:

Espanyol visitará a Atlético de Madrid con una sola duda en su once

A Atlético de Madrid lo arbitrará otra vez un debutante en la categoría

El ex colchonero tiene mucho que ver con este presente de la escuadra. El oriundo de Bury participó en las trece fechas que ya fueron disputadas en el campeonato, y completo los 90 minutos en casi todos Anotó un gol, dio dos asistencias y fue elegido como MVP en nueve compromisos. Sin dudas, uno de los pilares para el club más rico del mundo, con 320 billones de euros.

Estos números distan mucho de lo que fue su etapa en el Atlético de Madrid. Si bien en la capital española sumó bastantes minutos, nunca entró definitivamente en el once titular de Diego Simeone, y vio en reiteradas ocasiones cómo Marcos Llorente le robaba el puesto a pesar de que esa no era su posición natural.

El día en que Trippier complicó su paso por el colchonero

La etapa de Trippier en el Atlético de Madrid quedó marcada por un hecho particular. La Federación Inglesa de Fútbol sospechaba que había participado en apuestas relacionadas con su fichaje, y en diciembre de 2020 decidió aplicarle una sanción de diez semanas sin poder jugar. Desde la capital española quisieron apelar, pero la FIFA ratificó la medida, y el lateral pasó dos meses y medio fuera de las canchas.