Pérdidas, disparos de bala, resiliencia y sueño cumplido… La historia de vida de Reinildo

Reinildo llegó al Atlético de Madrid el pasado enero por sólo 3 millones de euros. Vino desde el Lille y ser ha convertido en uno de los pilares defensivos de Simeone. Su posición natural es de lateral izquierdo, pero su polifuncionalidad le permitió al técnico argentino ponerlo de central para poder implementar una linea de 5.

Reinildo nació en 1994 en Beira, provincia de Sofala, la segunda ciudad más poblada de Mozambique después de Maputo, su capital. Y lo hacía en una familia muy pobre. “No necesariamente tenía que comer ni donde dormir”, reconocía él mismo en una entrevista en France Football. Recorría largas distancias a pie, ya mascaba fútbol. Porque en su casa no podía haber nada pero el fútbol no faltaba.

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El primer golpe para Reinildo lo sufriría a sus 11 años, cuando sufrió la pérdida de su padre. Sin embargo, el nacido en Mozambique dijo: “Me dio una gran motivación para seguir jugando a fútbol. Lo convertí en mi misión”. Algo a lo que agarrarse en medio de tanta penuria y que lo pudo cumplir. Coon 18 años, en 2012, firmaba su primer contrato como futbolista profesional con el primer equipo del Ferroviario de Beira.

En 2015 abandonaría África rumbo a Lisboa y la pena llenando su maleta. Lo hacía huérfano, qué palabra tan dura, tan difícil de asumir. “Perdí a mi madre. Al menos pude despedirme de ella en el hospital y me pidió que lo diera todo”. Palabras que aún resuenan en su interior y toma como consuelo. Atadas a su promesa que le hizo a su padre.

El tiroteo al que sobrevivió

Después de tantos golpes que le dió la vida, Reinildo logró asentarse en el Lille y ser una parte fundamental para que el equipo logrará conquistar la liga francesa. Con el trofeo de campeón francés, viajó a Mozambique donde fue recibido por el Presidente de la República, Filipe Nyusi, las autoridades municipales de su ciudad natal. Pero no todo fue alegría. En su estadía, sufrió un asalto que terminó en un tiroteo, al que pudo sobrevivir.