Por Andres Aguilar
Tras jugar para el Atlético de Madrid entre 1979 y 1982, Marcos Alonso pasó al Barcelona y ganó cinco títulos, los cuáles representaron sus únicos palmarés en su trayectoria como futbolista.
Uno de ellos fue la Copa del Rey de 1983, en el que consiguió arrebatarle la ilusión a todos los aficionados del Real Madrid en el último minuto del partido. Un centro pasado de Julio Alberto desde el costado izquierdo de la cancha y un salto de superhéroe de Alonso en la puerta del área chica trajeron como resultado un cabezazo letal que se metió de lleno en el arco.
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Más allá de no haber significado un logro para las vitrinas del ‘Colchonero’, el hecho de haberle amargado por completo la fiesta a los hinchas ‘Merengues’ fue un mimo para la afición rojiblanca en la que seguramente más de uno hizo un apretón de puño.
El partido se disputó el 4 de junio de 1983 en La Romareda, estadio perteneciente al Real Zaragoza. Gracias a ese gol agónico Real Madrid cayó 2-1 y se quedó sin el ansiado trofeo.
Se espera que tanto para el partido de Barcelona como Atlético de Madrid, rivales en calidad de visitante de Celta de Vigo y Villarreal respectivamente, el árbitro llame a realizar un minuto de silencio en la mitad del campo previo al inicio de los encuentros.
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